Vladimir Kara-Murza, opositor al Kremlin, recibe 25 años de prisión por traición

Los fiscales, que habían solicitado una pena de 25 años, lo acusaron de traición, entre otros delitos, y de desacreditar al ejército ruso al difundir «información deliberadamente falsa» sobre su comportamiento en lo que Moscú califica de «operación militar especial» en Ucrania.

Una sentencia «motivada políticamente»

Tras enterarse de que pasaría los próximos 25 años en una colonia penitenciaria de alta seguridad, Kara-Murza declaró: «Rusia será libre», un conocido lema de la oposición. Según una de sus abogadas, Maria Eismont, él percibió esta dura pena como un reconocimiento a su efectiva labor como político opositor.

«Cuando se enteró de que tenía 25 años, dijo: ‘Mi autoestima ha aumentado, entiendo que hice todo correctamente. Es la puntuación más alta que podría haber obtenido por lo que hice, por lo que creía como ciudadano y patriota'», afirmó.

Eismont anunció que el equipo de Kara-Murza apelaría la sentencia del lunes, a la que calificó de plagada de violaciones legales. El Kremlin, consultado sobre el veredicto, dijo que no comentaba las decisiones judiciales.

En Londres, Gran Bretaña – que en 2020 impuso sanciones al juez que preside el caso por supuestas violaciones de derechos humanos – dijo que había convocado al embajador ruso para protestar por lo que calificó de condena «motivada políticamente».

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Los embajadores británico y estadounidense denuncian la condena

Ante el tribunal de Moscú, la embajadora británica Deborah Bronnert dijo a los periodistas que Kara-Murza había sido sancionado por denunciar valientemente la guerra de Rusia en Ucrania y exigió su liberación inmediata.

La embajadora estadounidense Lynne Tracy, hablando a su lado, dijo que la condena de Kara-Murza era un intento de silenciar la disidencia.

«La criminalización de la crítica a la acción gubernamental es un signo de debilidad, no de fuerza», declaró Tracy.

Poco después de enviar decenas de miles de soldados a Ucrania en febrero del año pasado, Rusia introdujo leyes de censura en tiempos de guerra que han sido utilizadas para silenciar voces disidentes.

Tatiana Stanovaya, fundadora de la firma de análisis R.Politik, dijo que el cabildeo de Kara-Murza a favor de sanciones contra Rusia había irritado al Kremlin durante mucho tiempo y que su condena era una advertencia.

«Es un veredicto destinado a enviar una señal y probablemente no sea el último de su tipo», escribió en la aplicación de mensajería Telegram.

«En el futuro, los servicios de seguridad pueden ser mucho menos cuidadosos y detener a cualquiera si están en territorio ruso y critican al régimen de Putin. Es una advertencia a todos los activistas anti-Putin: no regresen o los encarcelaremos, de facto de por vida.»