La semana de cuatro días gana terreno en el Reino Unido para impulsar la productividad

Una respuesta a la disminución de la productividad

Algunos economistas y empresas consideran la semana laboral de cuatro días como una solución potencial a la disminución de la productividad observada en el Reino Unido y en otras economías occidentales. La productividad, es decir, la producción económica por hora trabajada, registró un crecimiento promedio de solo el 0,75 % entre 2010 y 2019 en el Reino Unido. El Banco de Inglaterra prevé que esta tendencia continuará en los próximos años, en parte debido al aumento de las restricciones administrativas relacionadas con el Brexit.

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Resultados positivos para la mayoría de las empresas involucradas

Five Squirrels fue una de las 61 empresas, la mayoría con 25 empleados o menos, que participaron en el experimento de semana laboral de cuatro días más grande del mundo el año pasado. De estas 61 empresas, 56 mantuvieron esta política después de la prueba, y la gran mayoría afirmó que la productividad y el rendimiento general se mantenían.

Inversiones para acompañar la transición

La transición hacia una semana laboral de cuatro días puede facilitarse mediante inversiones en equipos y capacitación. Por ejemplo, Five Squirrels adquirió nuevas máquinas para producir cantidades más pequeñas de productos de manera menos intensiva en mano de obra y también invirtió en una nueva etiquetadora. Además, la empresa implementó una planificación semanal para agrupar las tareas en lugar de alternar entre ellas, lo que permitió aumentar la tasa de etiquetado de botellas de 25 a 120 por hora.

Un argumento moral a favor de la semana de cuatro días

«Han pasado casi 100 años desde que pasamos a la semana de cinco días… es hora de que comencemos a pensar de manera más coherente en los próximos pasos», dijo Jan-Emmanuel De Neve, profesor de economía en la Universidad de Oxford.

De Neve cree que existe un argumento moral a favor de la semana laboral de cuatro días, ya que muchos trabajadores informan de mala salud mental. Aunque las grandes empresas suelen ser más escépticas respecto a esta idea, los ensayos y la pandemia de COVID-19 han obligado a los empleadores a ser más abiertos a diferentes prácticas laborales.

Una ventaja para las pequeñas y medianas empresas

Nick South, socio principal en Boston Consulting Group, considera que las pequeñas y medianas empresas podrían aprovechar la semana laboral de cuatro días para atraer talento. Las grandes empresas podrían tener más dificultades para implementar esta política a gran escala, mientras que las pequeñas empresas con una cultura empresarial más compartida podrían encontrar más fácil adaptarse a esta nueva dinámica.

Por último, la agencia de contratación británica Reed.co.uk ha informado de un aumento en el número de ofertas de empleo que ofrecen una semana laboral de cuatro días desde principios de año, aunque esta política no es adecuada para todas las empresas.